El padre de la estrella Rubina Ali está dispuesto a venderla.
El hombre se queja de que sólo ha recibido una pequeña cantidad de dinero tras el éxito de la película.
Rafiq Qureshi, el padre de la niña actriz protagonista de Slumdog Millionaire, la película sobre los suburbios indios que se llevó ocho Oscar, ha intentado vender a su hija Rubina, que tiene nueve años, según informa la prensa británica.
El hombre, que vive en uno de los peores ’slums’ de Mumbai, ha dicho que sólo está pensando “en el futuro de Rubina”.
Qureshi se queja de que tras el éxito de la película no se siente “cuidado”. “Nos dieron algo de dinero (150.000 rupias -unos 2.200 euros-) al principio, pero nada más”. “Dijeron que nos darían una casa, pero todo lo que hacen es hablar“, dice.
La familia explica que “la vida de Rubina es miserable” y que quieren “darla en adopción y recibir alguna compensación a cambio”. El precio, 50.000 libras (unos 55.500 euros), aunque algunas fuentes hablan de hasta 200.000 (unos 222.000 euros). Su hermano Mohiuddin asegura que “Rubina es una niña especial, es una niña de Oscar“.
El padre recuerda que la pobreza que se reflejó en la película es su día a día: “Vivimos todos en una habitación, siete dormimos en el suelo. Gano 2 ó 3 libras al día. Tengo que pensar en qué es lo mejor para mí, para mi familia, y para el futuro de
Rubina”.
El hombre se queja de que sólo ha recibido una pequeña cantidad de dinero tras el éxito de la película.
Rafiq Qureshi, el padre de la niña actriz protagonista de Slumdog Millionaire, la película sobre los suburbios indios que se llevó ocho Oscar, ha intentado vender a su hija Rubina, que tiene nueve años, según informa la prensa británica.
El hombre, que vive en uno de los peores ’slums’ de Mumbai, ha dicho que sólo está pensando “en el futuro de Rubina”.
Qureshi se queja de que tras el éxito de la película no se siente “cuidado”. “Nos dieron algo de dinero (150.000 rupias -unos 2.200 euros-) al principio, pero nada más”. “Dijeron que nos darían una casa, pero todo lo que hacen es hablar“, dice.
La familia explica que “la vida de Rubina es miserable” y que quieren “darla en adopción y recibir alguna compensación a cambio”. El precio, 50.000 libras (unos 55.500 euros), aunque algunas fuentes hablan de hasta 200.000 (unos 222.000 euros). Su hermano Mohiuddin asegura que “Rubina es una niña especial, es una niña de Oscar“.
El padre recuerda que la pobreza que se reflejó en la película es su día a día: “Vivimos todos en una habitación, siete dormimos en el suelo. Gano 2 ó 3 libras al día. Tengo que pensar en qué es lo mejor para mí, para mi familia, y para el futuro de
Rubina”.
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